Narración ficticia.
“El
origen de las castas en México”
Autor: María Elena Leyva Benítez.
Les
contaré que; corría el año de 1518, en las playas tropicales cercanas a la península de Yucatán,
propiamente en Tabasco, bañadas por las cristalinas aguas del Océano Atlántico,
llegan 11 enormes casas flotantes, con 500 hombres , 100 marineros, 16 caballos , once piezas de
artillería y unos frailes; además de que asustan a todos los habitantes ribereños, los cuales nunca habían visto cosa semejante ,
de ellas, que solo se quedan a una distancia conveniente, bajan, en otras más pequeñas, muchos hombres,
vestidos de forma diferente a la delos lugareños; su piel es más clara, su pecho brilla, su cara
está llena de pelo, en sus piernas hay
cubierta de algo contrario a lo visto en
esa región, hace recordar a los nativos una vieja leyenda sobre la salida de su
Dios Quetzalcóatl y la promesa de un inminente
regreso con el objetivo primordial de recuperar su reino, perdido en manos de
otro dios: Tezcatlipoca.
Al
llegar a tierra, unos hombres enjutos, enfundados en tosco ropaje oscuro, sin
brillo, se arrodillan y hacen un extraño trazo sobre su cara; son frailes franciscanos, agustinos y
jesuitas, que acompañan a los conquistadores, que clavan una enorme manta en
las arenas prístinas de esa playa, mientras en el otro extremo de la misma, unas
caras de piel morena, expectantes los observan, para posteriormente enviar un
mensajero al tlatoani gobernante con la
noticia de esta esta extraña visita, que llegará a revolucionar y hasta cierto
punto a extinguir su hasta ese momento pacífico mundo.
Se corre
la noticia por todo ese orbe hasta ahora conocido, llega a oídos de un gran
dirigente, un personaje controversial, demasiado apegado a sus raíces, su
linaje, su religión, sus costumbres y
sus miedos; también a una población que
espera noticias más concretas sobre esta
llegada tan extraña, tan temida tan funesta.
El
mensajero llega todo sudoroso, asustado y nervioso a darle el mensaje sobre la
llegada de enormes casas flotantes, con unos seres extraños, con la fisonomía
parecida al Dios que sus sacerdotes les recuerdan; “El Gran Quetzalcóatl”, algunos de esos seres tienen cuatro patas, son
enormes y llevan sobre su cuerpo a otros seres de dos patas parecidos a hombres
vestidos con ropaje brillante como el sol, en algunas partes tienen pelo aparte
del de la cabeza, traen unas varas que brillan, truenan y matan, otros visten
diferente, ven diferente, obran diferente.
Moctezuma, el gran tlatoani mexica, al escuchar esto se llena de temor, él cree
que perderá su amado reino pues llega a su mente la vieja leyenda del regreso
de su dios creador, esto le hace concebir una “genial idea”; enviarle regalos que les hagan pensar en
regresarse por donde llegaron; ordena enviarles frutas, animales nativos, objetos para él
preciosos de las diferentes regiones que gobernaba y como ofrenda mejor: 20 esclavas, hermosas mujeres nativas de esa
tierra virgen, hermosa y voluptuosa, jamás
conocida por los recién llegados.
La
comitiva enviada por el tlatoani, llega a entrevistarse con el conquistador
español llamado Hernán Cortés, con señas, sonidos guturales, mímica y gestos,
le indican que lo llevado es un presente de su tlatoani, el cual les pide se
regresen al lugar de donde vinieron.
Para la
mayúscula ambición del conquistador esto en un incentivo que lo motivará a quedarse, despertó en él la voraz hambre de poder
y riqueza, ambición que de suyo era su leal e inseparable compañera, su eficaz consejera,
su mejor amiga, su entrañable amor.
Al ver a
las esclavas regaladas, él, como todo buen español, enamoradizo, apostador y
fiel representante de su sexo, decide quedarse con una llamada Malintzin o
Malinalzin, a quien después y por la gracia del bautismo conoceremos como Doña Marina,
de esta unión nace el que pudiera llamarse “primer mestizo registrado por la historia”
; Martín Cortés, segundo marqués del
Valle de Oaxaca, título que heredará de su padre.
Con el
correr del tiempo y las diferentes relaciones que se dan con la conquista y los conquistados; se realizan “matrimonios”, uniones,
amancebamientos o amasiatos y porque no, la cópula con las diferentes razas existentes
y las posteriormente traídas para la conquista y colonización de las tierras
descubiertas, se da origen a las llamadas
“castas”; entre las más conocidas e importantes están las formadas por la unión
de:
Nombre
|
razas que se combinan
|
1.-
castizo
|
Mestizo /
español
|
2.- mulato
|
Español / moro
|
3.-
albino
|
Español / morisco
|
4.-
tornatrás
|
Español / albino
|
5.-
tente en el Aire
|
Español / tornatrás
|
6.-
morisco
|
Español / mulato
|
7.-
chino
|
Morisco / español
|
8.- salta
Atrás
|
Chino / indio
|
9.-
lobo
|
Salta Atrás / mulato
|
10.-jibaro
|
Lobo / chino
|
11.-
albarazado
|
Jibaro / mulato
|
12.-
cambujo
|
Albarazado / negro
|
13.-
campamulato
|
Sambaigo / lobo
|
14.- no
te entiendo
|
Tente en el aire / mulato
|
15.-
coyote
|
Indio / mestizo
|
16.-
chamizo
|
Coyote / indio
|
17.-
harnizo
|
Español / coyote
|
18.-
zambo
|
Indio / negro
|
19.-
barcino
|
Albarazado / mulato
|
20.- allí
te estas
|
Coyote / mestizo
|
21.-
sambaigo
|
Cambujo / indio
|
Los hijos de “la madre patria”, los hijos de “La
raza de bronce” , los “Hijos del Sol naciente” y los hijos de “La África
doliente” han conformado toda una gran estirpe:” Los
Hijos de la Nueva España”.
Toda
esta gama de combinaciones de razas coexistieron,
a veces en forma armónica, otras
beligerantes y otras más pacíficas.
Los
hijos de Hernán Cortés y “La Malinche” y
los demás conquistadores que lo acompañaron, han transitado por todas las
combinaciones étnicas para formar la “nueva Raza de Bronce”.
Para concluir
añadiré que en la actualidad toda esta serie de combinaciones raciales hacen de
nuestra raza una policromía de pieles, rasgos, grupos históricos, zonas de
influencia o afluencia y convierten al mexicano de nuestros días en el poseedor de una idiosincrasia tan característica, multicultural, multirracial,
multiétnica pero también tan rico en historias que englobadas, concatenadas,
entrelazadas y combinadas entre sí
forman la “Historia de México” (antiguo,
virreinal y actual)
Maestra de verdad me deja impactado de la creatividad que tiene para la narrativa, esa facilidad para la redacción,, y esa forma de contar esos pasajes de la historia hacen que uno forme parte de ella.. la felicito..
ResponderEliminarÚnico detalle que me gustaría aclarar, los primeros mestizos de los cuales se tiene conocimiento son los hijos del naufrago español Gonzalo Guerrero y Zazil princesa de chactemal (actualmente Chetumal, capital del estado de Quintana Roo). Guerrero no quiso regresar con los españoles a la llegada de Cortés, si no que lucho contra los conquistadores del lado de los mayas.
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